“Land of 10000 rakes”, Tierra de los 10000 rastrillos. Estas palabras se leen en un chaleco de pescador.
Cualquier jugador de los Twins que durante esta temporada de béisbol disparaba un jonrón lucía este curioso atuendo acompañado por una caña de pescador. Nació de la idea del lanzador venezolano Pablo López y es un claro homenaje a la tierra que representa el equipo. ¿Qué significa ‘rake’? Originalmente en béisbol, raking es una manera de decir que estás en racha. Además, es un juego de palabras con el ‘10000 Lakes' que aparece en las matrículas del territorio de la estrella del norte.
La realidad es que hay muchos más lagos y puede que todavía no se hayan descubierto todos. Si tienen la gran idea de ir a visitar la reserva natural Boundary Waters Canoe Area Wilderness -uno de los parques naturales más fascinantes del mundo-, puede que descubran uno nuevo y por supuesto en este caso podrían asignarle el nombre que prefieran. Quien les escribe intentó hallar uno para llamarlo ‘Lago Manny Ramírez’ en honor a uno de sus ídolos. No tuvo suerte. Quizás volverá a intentarlo.
La propia etimología de la palabra de este estado nos recuerda que estamos en un sitio repleto de agua. En el idioma de los Dakota, el río Minnesota se llamó así por una de estas dos expresiones, mní sóta quiere decir agua azul cristalina o Mníssota ‘agua turbia’. Hay versiones más fantasiosas que dicen que el significado podría ser ‘agua que se refleja en el cielo’.
Un territorio enorme y peculiar. En invierno víctima de un frío surrealista pintado magníficamente en las secuencias de la película Fargo, obra de los Hermanos Coen. En primavera la naturaleza se despierta y el verde nos regala un paisaje asombroso. Los geniales guionistas nativos de Minneapolis, cuyos familiares emigraron desde países del Europa del Este, describieron el área residencial donde se criaron como una ‘Siberia con algunos restaurantes familiares’. Un paisaje en el que, al neto de las diferencias con la encantadora San Petersburgo, encajarían los protagonistas de las memorables Noches Blancas de Dostoyevski.
La gorra del combinado de béisbol nos sugiere otra peculiaridad. Aquel ‘TC’, acrónimo de Twin Cities, porque Minneapolis y St.Paul son dos ciudades que forman una única área urbana. Minneapolis es la capital cultural. Nos ha regalado nombres de enjundia como Francis Scott Fitzgerald, pluma inigualable de la Generación Perdida. Charles Monroe Schultz, padre de una tira de prensa que desde 1950 hasta la muerte de su autor ha acompañado más de medio siglo de historia estadounidense, los ‘Peanuts’ y sus memorables personajes como Snoopy y Charlie Brown. En su pico de popularidad llegó a ser publicada en más de 2500 periódicos y a ser traducida a 40 idiomas. Y cómo olvidarnos de un tal Zimmerman, mejor conocido como Bob Dylan. Cantante genial de los últimos 60 años, nacido en Duluth, una ciudad de frontera que si visitan en los meses de invierno les inyectará la esencia del verdadero Minnesota.
Agua, frío, paisajes verdes e interminables. Las condiciones ideales para una inmigración masiva desde el norte de Europa que se puede notar todavía en platos de la cocina local. Cierta manera de cocinar pescados como el salmón y el bacalao. Las albóndigas que en todo el mundo se comen en aquella famosa cadena de muebles sueca. Las mezclas de tradiciones culinarias nos han regalado también una deliciosa hamburguesa con queso fundido en su corazón que se puede encontrar por aquí. El Jucy Lucy.
Junto con la inmigración de los países de la Europa Central y del Este, desde donde han llegado las familias de los famosos ‘minnesotans’ que hemos mencionado hasta aquí, este es el sitio que ha visto la mayor inmigración escandinava en los Estados Unidos. Aquí los que venían de aquella parte del mundo encontraban las condiciones ideales para poder trabajar estas tierras tan bravas. Y lo hacían impávidos bajo cualquier condición. Se crió un efecto bola de nieve, una llegada masiva, que ha hecho que todavía hoy más de 150 años después la cultura escandinava está muy viva como en ningún otro estado de la nación.
Cuando cinco hombres -tres de Minneapolis, uno de Saint Paul y uno de Duluth-, dos de los cuales de claros apellidos nórdicos, decidieron fundar un equipo de football en Minneapolis quisieron darle el nombre de Vikingos. En homenaje a los guerreros provenientes de Escandinavia que realizaban saqueos y eran famosos por ser grandes navegantes. Estas figuras legendarias hubieran representado perfectamente al territorio y por supuesto hubieran destilado miedo en las venas de los rivales. Al fin y al cabo una enorme cantidad de los habitantes de Minnesota tenían origen vikinga. La pintoresca fanaticada ha introducido el cántico ‘Skol’ en homenaje a esta palabra que los vikingos utilizaban cuando brindaban. Además el equipo se llamó Minnesota, no Minneapolis Vikings, porque tal y como ocurre con los cuatro equipos de la región, -los ya mencionados Twins, los Wild y los Timberwolves- la idea es que representen al estado en su totalidad.
El combinado empezó con dificultades, pero a partir de finales de los años 60 y a lo largo de toda la década siguiente ha sido uno de los mejores, primero de la American Football League y después de la unión con la National Football League, -actual NFL-, con Bud Grant como entrenador y una defensa amenazadora pasada a la historia con el apodo de Purple People Eaters. El morado es junto con el blanco y el amarillo el color del equipo. Nos recuerda a un gran mito de la urbe, Prince y su obra maestra ‘Purple Rain’. El QB era el inolvidable Fran Tarkenton. Disputaron 4 Super Bowl. Lamentablemente se han convertido en la primera franquicia capaz de perderlos todos. Los monstruos de la época como Dolphins, Cowboys, Steelers y Raiders han sido demasiado para ellos.
En los siguiente años nunca han vuelto a un Gran Baile. En los Playoffs el equipo se vino abajo pese a tener a talentos como Randy Moss y Adrian Peterson. Ahora quieren escribir otra historia. Esta temporada ha empezado mal, pero las cosas han ido mejorando gracias a la magia del rookie Jordan Addison. Eso sí, debido a una grave lesión, tendrán que batallar sin su mariscal de campo titular, Kirk Cousins. Más allá del ‘You like that’, el de Illinois ha conquistado a los aficionados a través de la serie Quarterback. Un cacho de pan. Ahora a los vikingos les toca retrotraerse y no arrojar la toalla. Es momento de pintar el rostro, enderezar el casco y continuar como si estuviesen navegando en los mares del Norte.