El próximo domingo, Nueva Zelanda y Sudáfrica determinarán quién se consagrará campeón del Mundial de Rugby. Tengo entendido que, para quienes son fanáticos de dicho deporte, se trata de una final apasionante, dado que ambas naciones ostentan 3 trofeos de la Copa del Mundo.
Aquí, en el planeta NFL, no estamos demasiado enterados del tema. Es curioso: cada vez que menciono mi devoción por el fútbol americano, una de las primeras acotaciones que obtengo es: "ah, ¿parecido al rugby, no?".
Por suerte, hace aproximadamente un siglo, un grupo de estadounidenses descubrió el pase hacia adelante y, desde entonces, la NFL y el rugby han ido por caminos distintos.
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Sin embargo, hoy vamos a reivindicar al rugby gracias a una jugada que ha despertado una (desmesurada) cantidad de polémica en la presente temporada de la National Football League.
A esta altura de la, no hace falta explicarla demasiado. Ya tienen la imagen incrustada en su cabeza. 4th & 1. 9 jugadores se hacen bien chiquitos, imitando un scrum o un maul en rugby. Jalen Hurts se para justo detrás de Jason Kelce, el podcastero más popular de USA junto a su hermano Travis. Por último, un onceavo jugador se para entre uno y dos metros por detrás, sin hacer demasiado.
Y entonces: a empujar. Esta es, señoras y señores, la Tush Push (o la "Brotherly Shove" como la intentan nomenclar en Philadelphia):
La Tush Push, cuando es ejecutada por los Eagles (y este es uno de los puntos clave) es una jugada indefendible. Tiene el % de éxito más alto de cualquier acción ofensiva en toda la liga. De nuevo: cuando la llevan a cabo Hurts, Kelce y el resto del equipo que dirige Nick Sirianni.
El propio head coach expresa casi todo lo que yo tendría para decir sobre esta jugada. Escuchémoslo:
"Ustedes la han visto en otros equipos". Claro que sí. La NFL (como cualquier liga deportiva del mundo, en realidad) es una copy-cat league. Esto quiere decir que, ante una innovación de un equipo que parece ser exitosa, no te quepa la menor duda de que los demás la intentarán replicar para su propio beneficio.
El problema, como también dice Sirianni, es que las otras 31 franquicias no pueden imitar la Tush Push. "Si todos pudieran hacerla, todos la harían". Pero claro, no todos tienen a Kelce o a la bestia humana de Lane Johnson en su línea ofensiva. No todos tienen un QB como Hurts, que hace sentadillas todos los malditos días de su vida, razón por la cual tiene (mucha) más fuerza de piernas que un quarterback estándar. Y no todos tienen a un entrenador con el coraje de Sirianni, como para mandar la jugada dos veces dentro de su propio campo, en Sunday Night Football y contra la ofensiva más potente de la liga como es la de Miami Dolphins.
Mike McDaniel, el excelente entrenador de los Dolphins, también opinó sobre la Tush Push y explicó porque no tiene ningún problema con su implementación:
Voy a dar una sola vez la siguiente concesión, antes de seguir ridiculizando la noción que sostiene que realizar esta jugada equivale a hacer trampa. Sí, es cierto que es anti-climática. Es cierto que, a los ojos del espectador, puede resultar poco atractiva.
Pero, para el caso, también lo es el QB-Sneak. Entonces que: ¿vamos a bannear una jugada sólo porque no nos gusta cómo se vé? ¿O porque puede definir un partido? Si piensan así, permítanme recordarles que el último Superbowl se definió por un pañuelo amarillo. Más anti-climático que eso no existe.
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No tengo dudas de que, tarde o temprano, algún coordinador defensivo logrará descifrar la Tush Push. Al menos para que no sea exitosa en más de un 95% de los casos (en el caso de Philly). Lo sé porque así ha funcionado siempre la NFL.
Primero llega la innovación, seguida de un período de tiempo en el cual se explota la ventaja conseguida a través de dicha innovación. Luego (generalmente en la off-season), se desarrollan alternativas para contrarrestar esa acción (piensen, por ejemplo, en el período de 1-2 años de la formación pistol, que llevó a Colin Kaepernick a un Superbowl) y el círculo vuelve a empezar.
Así que amigos: dejen tranquilo a los Eagles. Nadie está haciendo trampa. Simplemente son muy muy buenos en esto. Quizá, en lugar de lloriquear y pedir que la NFL anule la Tush Push, deberían ponerse a pensar una de dos cosas: o una defensa acorde para que no te ganen siempre esa yardita en 4th & 1, o porque no esperar a que pase este domingo y contratar a los All Blacks (o a los Springbooks, claro) para que te enseñen cómo hacer para que salga bien.