En la NFL tenemos al quarterback con el contrato más grande de la NFL: Patrick Mahomes y sus 450 millones de dólares. Está el quarterback con el mayor dinero garantizado: Deshaun Watson, con 230. Contamos con un total de ocho quarterbacks que solo por esta temporada van a ganar más de 30 MDD. Y luego tenemos a Jalen Hurts, quarterback de Philadelphia Eagles, top 10 de la NFL en porcentaje de pases de completados, yardas de pase por partido, ratio touchdown-intercepción y rating de pasador en lo que va de campaña, que tiene un contrato exacto para 2022 de 1,157,744 de dólares.
Los Eagles tienen una de las mayores gangas, si no la mayor, de toda la competición en su quarterback. Hurts ha dado un salto de calidad tremendo este año y gracias a este contrato tan bajo, que sin duda se resolverá el año que viene, Philadelphia ha montado a su alrededor una plantilla tan completa que a día de hoy es la única imbatida en la NFC tras tres semanas de juego.
El camino de Hurts hasta el estrellato en los profesionales no ha sido sencillo. En college, en Alabama, tuvo una meteórica campaña freshman en 2016. Fue nombrado jugador ofensivo del año en la SEC y solo una histórica actuación de Watson en la final le privó de ganar el campeonato colegial. Un año después consiguió el título, pero a un precio muy caro. Fue sentado al descanso del College Football National Championship Game en favor de Tua Tagovailoa, quien ganó el duelo con un pase de touchdown en la prórroga a DeVonta Smith. Hurts perdió el puesto de QB1 en Alabama y eventualmente realizó el transfer hacia Oklahoma para su última campaña colegial en 2019. Allí resucitó su carrera, liderando a los Sooners hacia la final four con plusmarcas personales de yardas y pases de touchdown por el camino. Fue segundo en la votación del Heisman Trophy, siendo solo superado por Joe Burrow.
Sin embargo, cuando llegó el Draft de la NFL de 2020 no era considerado uno de los proyectos élite. Salió en segunda ronda, bastantes puestos más tarde que el Big-Three de aquella promoción (Burrow, Tua y Justin Herbert) y que Jordan Love. En mi evaluación del jugador en aquel momento señalé que: Hurts a día de hoy no es un quarterback natural. Necesita un ataque muy adaptado a sus características físicas y que le defina claramente las lecturas para poder ser efectivo. La franquicia que le elija debe tener un plan muy claro en mente con él, ya sea como eventual titular o como quarterback con un paquete de jugadas.
El equipo que apostó por él, Philadelphia Eagles, ya tenía un claro quarterback número 1 en la plantilla, Carson Wentz, quien había firmado un contrato por 128$ millones la temporada anterior. La sensación de que iba a ser un jugador situacional para acciones puntuales era clara en aquel momento. Sin embargo, la campaña 2020 fue un completo desastre para los Eagles. Una franquicia que partía con aspiraciones de Super Bowl acabó involucrada en acusaciones de perder deliberadamente el último choque de la regular season para ganar una mejor posición de draft. El head coach Doug Pederson fue despedido y Wentz traspasado durante offseason.
El nuevo entrenador jefe, Nick Sirianni, le nombró QB1 en la pretemporada de 2021. Hurts jugó lo suficientemente bien para que el equipo sorprendiera a propios y extraños, metiéndose en playoffs con la última plaza de Wild Cards en la Conferencia Nacional. No obstante, aún se observaban deficiencias en su juego y Philadelphia fue básicamente un equipo corredor cuando mejor le funcionaron las cosas. Esta dinámica ha dado un giro radical esta temporada. En las últimas dos semanas, ante Minnesota y Washington, Hurts ha retrocedido para lanzar más de veinte veces en cada una de sus primeras mitades. Es algo que Sirianni intentó hacer al inicio de la campaña pasada, pero tuvo que retroceder en su estrategia dados los pobres resultados del equipo. Ahora los Eagles pueden ganarte lanzando la pelota, construyendo grandes ventajas antes del descanso. Es solo por esa razón que en el global de la campaña Philadelphia tiene más carreras que pases.
Hurts ha dado un salto de calidad importante en sus mecánicas de lanzador, siendo capaz de reconocer tendencias defensivas pre-snap y de ajustar en función de las mismas sus lanzamientos. Veamos una secuencia del partido del domingo pasado en Washington que prueba esto que comentamos. Los Eagles jugaron en el primer cuarto un concepto de dobles slants en el lado cerrado del campo con AJ Brown en el exterior y DeVonta Smith como gemelo (así llamamos al lado de la formación que tiene dos wide receivers) en el slot. Fijaros cómo el cornerback exterior juega con inside leverage (protegiendo el interior) y cómo Smith gana fácilmente separación sobre su par que estaba en off-coverage sin ayuda. Pase completo y primer down sencillo para Eagles.
Avanzamos hasta el segundo cuarto. Los Eagles están en la zona roja de los Commanders. De nuevo tenemos gemelos en el lado cerrado de la formación, Brown por fuera y Smith por dentro. Otra vez tenemos al cornerback exterior jugando inside leverage y al cornerback del slot en off-coverage. El concepto de rutas va a ser idéntico, dobles slants, pero observad cómo ahora Washington ayuda con uno de los safeties mucho más cerca de su compañero del slot. Los Commanders se protegen ante la ruta interior de Smith. Cuando el snap se pone en marcha observamos cómo DeVonta tiene una doble cobertura, el pase es por tanto inviable. Hurts entonces pasa a la lectura exterior, la de Brown. Con el cornerback, recordemos, jugando con inside leverage, el slant es una ruta difícil de completar. Sin embargo, en un detalle de madurez para la posición, Hurts le coloca el pase a Brown en el hombro retrasado para que pueda completar la recepción. Lo que parece un error de ball-placement es en realidad la demostración de que el quarterback está dominando los detalles más minuciosos del juego.
Hurts sabe en cada momento qué hacer con la pelota y está tomando por regla general buenas decisiones. Philadelphia es el equipo número 1 de toda la NFL en jugadas de pase de 15+ yardas y Hurts es el líder de la competición con la astronómica cifra de 9.3 yardas por lanzamiento. Cuando forman con cinco jugadores abiertos, los Eagles están siendo especialmente demoledores. En esas situaciones Hurts ha conectado 14/16 pases las dos últimas semanas, 7/8 contra Minnesota y 7/8 contra Washington. La media de yardas ha sido superior a las diez. Básicamente, cada vez que Philadelphia lanza con cinco receptores abiertos consigue un primer down. Una de las ventajas de jugar 5-wide es que define rápidamente la cobertura, puesto que las defensas no pueden disfrazarse o retrasar sus movimientos dado que esperan un lanzamiento rápido. Por supuesto, para jugar rutinariamente estas acciones has de confiar mucho en tu línea ofensiva para que sea capaz de proteger a tu quarterback por sí sola con sus cinco hombres. Jason Kelce y Lane Johnson continúan jugando al nivel más alto de su posición, pero en general todo el grupo está rindiendo a la perfección. Lo bueno para Eagles es que, si el rival no mete blitz y los cinco OL ganan a los cuatro de la DL, Hurts tampoco se ve obligado a lanzar con mucha premura, lo que facilita un poco más la lectura de la defensa. Y como bonus a todo esto, los huecos que se pueden crear para que el quarterback haga daño con sus piernas son muy importantes.
Contra Minnesota, en la semana 2, Hurts efectuó un pase de calidad en una situación así. Los Eagles forman con cinco abiertos, siendo la ruta deep-over de DeVonta Smith la lectura primaria. Tenemos dos claves en esta jugada, una el posicionamiento de los safeties. Si post-snap declaran el medio del campo abierto (dos safeties profundos) existirá ventana para el lanzamiento. En cambio, si el medio del campo está cerrado (un solo safety profundo), Hurts deberá progresar en su lectura. Tal como vemos en las imágenes, los dos safeties retroceden, el medio profundo de la defensa queda expuesto y Hurts lanza un pase perfecto para su compañero.
El punto extra de esta jugada que quiero que observéis es la amenaza de blitz por el lado derecho de la línea de Philadelphia. De haber entrado al rush el hombre que os señalo es más que probable que Hurts hubiese lanzado un pase caliente a Smith en lugar de la deep-over que necesita mucho más tiempo para desarrollarse. Mirad en el vídeo como el quarterback le hace un gesto pre-snap a Smith para que la comunicación sea ideal. Todo está muy engrasado en estos Eagles.
Por si fuera poco, las defensas tienen las manos llenas cuando se miden a Philadelphia por algo que sí sabían de antemano esta temporada que sería peligroso, sus conceptos de carrera y pase RPO. Hurts lleva tiempo siendo un maestro de estas acciones, que ya dominaba desde su primer año en Alabama. En función de la reacción de la defensa Hurts elegirá darle la pelota a su compañero en el backfield para que corra con ella, o bien se la quedará él mismo para realizar un lanzamiento o, como tercera opción, mantenerla el propio quarterback para correr. Contra Minnesota pudimos ver dos acciones casi idénticas que tuvieron desarrollos contrarios, pero en ambos resultados satisfactorios para la ofensiva. En la primera acción, en 3ª y tres, la defensa no compra para nada la carrera, Hurts se queda la pelota y completa el pase para el primer down.
Más tarde, en el segundo cuarto, en 3er down y 2 yardas, los Eagles cambian el personal, pero mantienen el concepto de rutas: movimiento pre-snap por detrás de la línea y combinación de rutas en el primer y segundo nivel de la defensa. La diferencia en la reacción del rival es clara: atacan con fuerza la caja para parar la carrera al tiempo que se meten en la cara de los receptores para impedirles separación en sus rutas. Hurts hace lo correcto en no darle la pelota al runningback y una vez que sale del pocket y observa a los defensive backs dándole la espalda la decisión es meridiana, correr él mismo con el balón. ¿El resultado? Un touchdown del quarterback en una acción de 26 yardas.
Pocos habrían pensado antes del inicio de la regular season que un Philadelphia – Jacksonville en la semana 4 sería un partido interesante, más allá del morbo de suponer el regreso de Doug Pederson a la casa donde conquistó el Super Bowl en su día. Hurts se va a medir a otro quarterback joven que está dando pasos de gigante este año, Trevor Lawrence. Las dos defensas están en la parte alta de la tabla. Todo apunta a que se vivirán grandes emociones en el Lincoln Financial Field. Un número uno del draft contra el quarterback del millón de dólares. No se lo pierdan.