¿Qué tal, compañeros? El fin de año ya está entre nosotros. Deseo de corazón que hayan pasado un buen 2023. En mi caso puedo decir que no estuvo nada mal, pero que aun así estoy contento de que se termine. Es como que… ya está, ¿no? Todo muy lindo, todo muy rico, pero pasemos la página.
En la NFL, el Año Nuevo es engañoso, dado que por supuesto todavía falta la parte más importante del calendario. Este domingo 31 se jugará la Semana 17, lo cual significa que sólo quedará un fin de semana de temporada regular antes de comenzar con los Playoffs.
Repasando lo que fue la sección 2023 de la temporada ´23-´24, me encontré con un patrón que dio origen a la columna de esta semana. Desde ya, el disparador fue el cruce entre Baltimore Ravens y San Francisco 49ers, pero ya llegaremos. Tal como fin de año, hay que trabajar (o, en este caso para ustedes, leer) para llegar a lo lindo.
Está claro que no es una novedad que comenzó con la presente temporada, pero siento que este año ha consistido de una sucesión de "partidos grandes", con historias fuertes y en momentos particulares del calendario. En reiteradas ocasiones, estos choques de titanes se sintieron como cruces de una fase final de Champions League, o, para traerlo a este continente, de la gloriosa Copa Libertadores de América (no se me ofendan, lectores mexicanos y norteamericanos, pero la Concachampions está lejos de ambas competiciones mencionadas).
Podría haber seleccionado más, pero para esta recorrida marqué ocho partidos, a los que se les pueden sumar (potencialmente) dos más en las últimas semanas de fase regular:
1- Semana 5: 49ers 42, Cowboys 10. Sunday Night Football, el verdadero primetime de los Estados Unidos. Lógicamente, la gran mayoría de estos encuentros se dieron en spots destacados como SnF.
Este duelo era importante por la paternidad reciente de San Francisco sobre Dallas, a quién los Niners eliminaron en las últimas dos postemporadas. También sirvió como el primer aviso de la temporada que se traía entre manos Brock Purdy, que aquella noche lanzó para 252 yardas y 4 touchdowns. Dak Prescott, por su parte, apenas llegó a 153yds, cometiendo 3 intercepciones. Ouch.
2- Semana 7: Eagles 31, Dolphins 17. Otro Sunday Night Football. En su casa y con la Tush Push, Philadelphia vapuleó a Miami. Ambos arribaron al choque con marca de 5-1. Una gran noche de Jalen Hurts, con 280yds y 3 TDs.
3- Semana 8: Bengals 31, 49ers 17. The one that Could Have Been…
Lisa y llanamente, la mejor actuación de un QB en toda la temporada. Así lo escribimos en este mismo espacio hace dos meses. Joe Burrow fue a Levi´s Stadium (por siempre Candlestick Park en nuestros corazones) y la des co ció: 28-32, 283yds y 3 TDs. Brock Purdy, aquella tarde? 2 INT
4- Semana 11: Eagles 21, Chiefs 17. Monday Night Football, con Joe & Troy (la mejor dupla de la liga, por lejos). El partido que tenía de todo. Revancha del Superbowl. Kelce vs Kelce. Dos firmes candidatos al título (al menos en ese momento).
Luego de los drops de Marquez Valdes-Scantling y Justin Watson, la noche parecía ser consagratoria para Hurts, a quien elegí como mi MVP de mitad de temporada (y, spoiler: a quien NO voy a elegir como mi MVP de la temporada).
5- Semana 13: 49ers 42, Eagles 19. Philadelphia era local y llegaba con récord de 10-1. San Francisco, con una sed gigante de revancha después del NFC Championship Game del año pasado que no pudo ser, tenía marca de 8-3 y pisoteó a su rival sin culpa alguna.
314 yds y 4 TDs para Purdy, en un claro mensaje enviado por el equipo de Kyle Shanahan, que se erigía definitivamente como el mejor equipo de la NFL a cinco semanas del cierre de la fase regular.
6-Semana 14: Cowboys 33, Eagles 13. Lo necesitaba como el aire para respirar Dallas este partido (y Dak en particular). 10-2 era la marca de Philly, 9-3 para Big D. Ambos terminaron 10-3 después de la paliza de los Cowboys, con un Prescott que jugó quizá el mejor partido de su carrera en temporada regular.
7- Semana 15: Bills 31, Cowboys 10. Sin embargo, una semana después, Dak apenas acumuló 134yds y lanzó 1 INT en una apática derrota de Dallas. Siendo sincero, Buffalo todavía no está como para ser considerado un equipo "grande" de esta temporada, pero si un resultado cae de su lado van a tener la oportunidad de convertirse en uno.
8-Semana 16: Ravens 33, 49ers 19. Monday Night Football. 11-3 vs 11-3. Y bueno, ya lo saben: 4 INTs de Purdy, 252yds y 2 TD de Lamar Jackson y un giro de 180 grados en la carrera a MVP.
Purdy, que abrió el lunes como -230 (es decir, mega favorito), lo cerró en +600 (la tercera o cuarta opción, dependiendo de cada casa de apuestas). Y Jackson pasó a ser el caballo en el que todos apuestan para ganador, al menos por ahora.
Este domingo, tenemos un choque más de estos. En Baltimore, los Ravens reciben a los Dolphins en un cruce que prácticamente definirá en un mano a mano quién será el primer preclasificado en la AFC.
Por último, en la Semana 18, los Bills viajan a la Florida para enfrentar a los Dolphins, en un duelo que (dependiendo del resultado entre BAL y MIA) puede definir: el 1 seed, la División AFC Este, un boleto de Playoffs para los Bills…o nada en particular.
A modo de reflexión final (que me gustaría profundizar pero bueno, fin de año viste), creo que la única consecuencia negativa que trajo haber vivido semejante cantidad de duelos directos es esta necesidad de ser terminante luego de cada resultado final.
Por si quedaba alguna duda, aviso que soy completamente parte del problema. Jamás un hipócrita, señores. Ni Hurts era el MVP después de ganarle a Kansas City, ni Dak lo era tras arrollar a los Eagles, ni Purdy lo perdió lanzando cuatro intercepciones.
De igual forma, ni San Francisco era invencible cuando pasó por encima a los Eagles, que tampoco iban a ganar todos los partidos con la tush push, como se decía allá por la Semana 11. En un lapso de siete días, los Cowboys pasaron de VOLVER a ser America´s Team (post victoria sobre Philadelphia) a otro ciclo de burlas por parte de Stephen A Smith (post derrota en Buffalo).
Paremos un poco la mano. Levantemos la copa el 31, disfrutemos de la familia y de unos días de descanso. Ya habrá tiempo para seguir asegurando cosas que son imposibles de asegurar. Que tengan una linda semana. Felicidades.