La vida acostumbra a acompañar malas cosas o acciones a las buenas, jamás nos suele dejar una felicidad plena. Por un lado, ya tenemos las finales de Conferencia y por otro, solo nos quedan dos semanas de competición dando comienzo, inminentemente después, al proceso pre-draft. Pero no caigamos en el desánimo, la NFL no para y no nos va a faltar contenido, seguro. Y con todo, nos encontramos con dos finales de Conferencia que, según las casas de apuestas, no están en ambas todos los que debían estar. Philadelphia y Chiefs cumplieron con su favoritismo, con más o menos dificultades, pero pusieron lo que había que poner para ganar, porque en esta fase solo importa ganar y ganaron con mejor adaptación a las circunstancias de cada partido. Los que rompieron el favoritismo de las apuestas fueron: Commanders sobre todo, y Bills en última instancia. Decía Lamar Jackson tras la derrota que: turnovers 'play a factor', y vaya si lo han hecho en su partido de Ravens contra Bills como en el de los Lions. Los 4 equipos que pasan tuvieron 0 turnovers. Regalos de Baltimore y Detroit acabaron por entregar las eliminatorias respectivas a sus rivales. Me detendré brevemente en estos dos equipos por su favoritismo no confirmado:
Lions
En el caso de Detroit, que empezaba el partido como máximo favorito con un -9.5 puntos en spread, jugando en casa y contra un QB rookie, Ford Field lleno, donde la presión debería ser para el rival, quien más se sintió presionado fue Detroit. La derrota, siendo un cúmulo de varias causas, tiene para mí 3 protagonistas que ordeno de mayor a menor importancia y que son muy difíciles de superar por cualquier equipo cuando esto se da.
- Una defensa de Lions que consiente 31 puntos al rival en solo la primera mitad, es muy difícil de sostener para ganar si además parte de esos puntos vienen de una mala gestión de balón por parte de la ofensiva que coloca al rival en una posición muy ventajosa. En cualquier caso, consentir todo avance por parte de Washington y forzar un único punt al rival en todo el partido es, cuando menos, rozar la inanidad.
- Un QB errático. Jared Goff ha completado una temporada regular muy buena con unos números a la altura de cualquier QB top, pero cuando más se pide a un líder de equipo, a la posición más importante en el ataque, a quien cobra más que nadie en esta plantilla porque así lo exigió su representante entendiendo que vale esos 53M/año y que puede llevar al equipo a lo más alto, es cuando hay que acertar, el final de los finales, ahí es cuando, en casa en el Ford Field, no debes entregar el balón tantas veces y parecer más un rookie que un veterano de 30 años. De la misma forma que en Playoffs del ejercicio pasado estuvo a la altura en las 3 rondas, es tan simple como, tras ver el partido, poder concluir que este año no ha sido así. Goff no estuvo al nivel exigible de lo que se le pide. No se puede entregar el balón 4 veces, es algo que no puede suceder, y más cuando ves al rival que no lo ha hecho en ninguna ocasión. ¿Esto implica que Goff es un mal QB? En mi opinión, no. Los hechos y números están ahí, pero sí creo que lo demostrado con sus estadísticas no es un fiel reflejo de la consideración global como QB top que comprende ese liderazgo y toma de decisiones en momentos críticos que no ha tenido.
- El Staff: Malas decisiones desde la banda. Desde el 3&1 del primer cuarto cuando se decide por el pase y se produce el fumble de Goff con una mala protección por el LG, como en un momento en el que todo se podía decidir, dejar a un WR, a Jameson Williams para que lance un pase fuera de números. Incomprensibles decisiones sumadas a las tomadas también por Aaron Glenn en defensa cuando propone blitz contra RPO. Daniels castigó la secundaria y por supuesto, con sus RPOs y los blitzes lanzados por la defensa local, rompió en carrera en todos los downs que hizo falta. Contra un equipo que mueve bien las RPOs el blitz no suele funcionar.
Baltimore Ravens
Por el lado de Ravens, Baltimore también ha sido víctima de errores propios, perfectamente omitibles pero que juega la excusa de la nieve que hace del balón más complicado de atrapar, y unas condiciones ambientales muy diferentes a un Dome. Ravens llegó hasta aquí, jugando la ronda divisional fuera de casa por los errores cometidos durante la temporada, y éste fue un partido que en Baltimore hubiera resultado muy diferente. Todos los enfrentamientos cuentan, y los del principio también. Dos veces entregó el balón Lamar Jackson, con un fumble y una intercepción, y dos Mark Andrews, un fumble y un drop clamoroso que le resbaló, probablemente por la humedad del balón bajo un clima difícil, cuando ya parecía que lo tenía atrapado en la zona de anotación. Y aquí sí, Bills hizo lo que no pudo Detroit, contener al QB que corre un ataque basado en RPOs y obligarle a jugar la mayor parte del tiempo con el pase. Y dentro de todo este caos, Lamar Jackson estuvo más que correcto por aire, si bien en carrera estuvo en menos de 40 yardas porque ese era el objetivo, no dejarle salir y Búfalo lo consiguió.
A Baltimore le falta algo que no se puede consentir en un equipo con la experiencia que atesora en competición, un roster élite, un QB de talento superior y con un HC que también participa de esa experiencia, y esto que le falta es la concentración necesaria en momentos clave de partido. Tiene una gran plantilla, pero los errores incomprensibles, no se pueden cometer. Imagino que la autocrítica será tónica por Baltimore, dirigida a la falta de ajuste de la plantilla, tanto en ese partido final como en muchos momentos de la temporada.
La Final de las Finales: Bills@Chiefs - CLAVES
La final de la Conferencia Americana (AFC) de la NFL se presenta como uno de los encuentros más esperados de la temporada, enfrentando a dos de los equipos más potentes y consistentes de la liga: Buffalo Bills y Kansas City Chiefs. El choque entre el ritmo de Buffalo en ataque que no deje respirar a Chiefs y a Spagnuolo, frente al tiempo que siempre busca Mahomes para ganar cada jugada contra una defensa de Bills que ha adquirido la confianza necesaria tras la victoria contra Ravens.
Kansas vuelve a otra final de Conferencia por séptima vez consecutiva y esto se convierte en un gigante contra el que debe luchar Búfalo, pero sobre todo, el mayor monstruo que va a enfrentar Allen será su duelo particular contra estos números:
- Récord en Playoffs: Allen (7-5) – Mahomes (16-3)
- Récord TD vs Turnovers: Allen (31-6) - Mahomes (47-9)
- Finales de Conferencia Jugadas: Allen (1) – Mahomes (7)
- Victorias en Super Bowl: Allen (0) – Mahomes (3)
Mahomes ya no juega para hacer las cosas más o menos bonitas, lo está haciendo para hacer historia de la NFL, para lograr su 4º Super Bowl y para alcanzar el threepeat de Kansas que nadie jamás logró antes. Está en esa posición que no sabe si volverá, la de escribir en los libros de historia algo que ni Tom Brady pudo además de alcanzar a Joe Montana y Terry Bradshaw con 4 Lombardis colocándose en segundo lugar tras el quarterback de San Mateo. No es poco lo que tiene a su alcance.
Varias claves a observar en el partido:
- Josh Allen y su cuádruple amenaza contra Spagnuolo: Carrera del QB, pase guardando el pocket, pase saliendo de protección y las Zone Reads y RPOs amenazando con carrera de Cook o Davis.
- Khalil Shakir contra la secundaria de Kansas que es la 18ª defensa en yardas consentidas por aire.
- Josh Allen contra Chris Jones y Karlaftis va a ser un duelo clave y aquí la OL de Búfalo va a tener mucho que decir.
- El tiempo que tenga Mahomes. Éste suele ser mucho, esté quien esté en frente, y minimizarlo debe ser un objetivo de Búfalo. Si hay algo que Patrick tiene por encima del resto, además del talento de brazo, es el gobierno de los partidos. Cada decisión que toma es la correcta y marca el tiempo de los mismos.
- Los terceros downs. No hay equipo mejor que Chiefs en este apartado, que no es más que consecuencia de la anterior clave.
- Kelce contra Milano y Bernard. Parece mentira después de una temporada tan irregular, que esté de nuevo siendo quien rompa las defensas rivales para primeros downs clave. Dejar que haga sus stops detrás de los Linebackers buscando siempre los sticks como viene haciendo tanto contra Steelers y el último partido contra Houston, puede ser una condena. Minimizar su participación es clave.
- No por ser menor visualmente, deja de ser una amenaza mayor: Kareem Hunt e Isaiah Pacheco contra la defensa de la carrera de Bills, que es la 12ª en yardas consentidas por tierra, van a dar el respiro necesario a Patrick. Sumar yardas y conceder tiempo a PH15 es algo trascendental en el juego de Reid. Que eso no pase de nuevo estará en la defensa tras la DL, con Bernard y Milano repartiéndose roles.
Es la madre de todos los partidos en esta ronda. Solo el hecho de poder ver todo el despliegue de cada uno de estos Quarterbacks para poder llevar a su equipo a la victoria va a ser un auténtico espectáculo, especialmente cuando lleguen esos momentos de toma de decisiones. Partidos que enfrenten Allen-Mahomes se han convertido en un clásico top para ver en cualquier momento y solo disfrutarlo por tantos detalles que nos van a dejar.
Una final inesperada: Washington@Philadelphia - CLAVES
Todos pensamos que lo hecho por Washington en Detroit no va a ser suficiente frente a una defensa que sí va a mostrar oposición, al menos bastante más que la que enfrentó en el Ford Field.
El partido que ejecutaron en la Motown fue impecable y Dan Quinn con Kingsbury aprovecharon cada pulgada que concedió Lions sin cometer un solo error, pero no sólo eso, sino que cuando hubo que crear jugadas en el ataque o saber leer la ofensiva rival, lo hicieron a la perfección dando a Lions donde más le dolió.
Mis claves insoslayables por las que va a pasar este partido:
- Commanders y su defensa: Contra Detroit concedió mucho, 31 puntos y con 5 turnovers por parte de Lions que contó con 5 drives menos finalizados de los 11 que desarrolló; es algo que deberá ver el bueno de Quinn para la final de la Nacional, no es poca cosa conceder tanto cuando el rival regala 5 drives de ataque.
- La defensa de Eagles: Probablemente por números es la mejor del campeonato. La final está servida y Washington jugará contra unos Eagles que no regalan nada. Desde luego Philly en ataque no van a ser los Lions, no van a poner tantos puntos en el marcador, principalmente porque no es su estilo ni lo necesitan por la defensa con la que cuenta. Sus Linebackers, mermados con la ausencia de Nakobe Dean, no van a dejar respirar a Daniels ni consentir que el backfield haga daño, pero que va a haber una contención importante no me cabe duda, ya se conocen por sus duelos en la División.
- De todo lo que cabe esperar del partido, el match up lo tenemos en Saquon Barkley y los Linebackers de Washington, aunque contra el running back de Philly no basta solo la atención de una línea, veremos la implicación de la DL y la secundaria. Recordemos que Commanders es de las peores defensas contra la carrera y esto es un reto mayúsculo, parecido al que le ofreció Detroit que pudo poner más de 200 yardas por tierra.
- Big Plays. Philadelphia es un equipo que vive de jugadas aisladas que implican una gran ganancia de yardas a diferencia de otros equipos como Detroit o Chiefs que construyen su ataque con un avance sostenido. Esta ganancia lo consiguen por tierra y por aire. La defensa de Washington evitando esas jugadas anulará una de las principales armas de Philly y puede decantar la balanza.
- Terry McLaurin y la secundaria de Eagles. Veremos quien sigue al receptor de Commanders, pero intuyo, conociendo a Fangio, que no será un solo hombre y se acercará más a una defensa basada en ayudas entre los CBs como Mitchell y Slay pero con CJGJ y Blankenship en esa colaboración.
- Hurts por tierra y OL élite de los de Pensilvania contra una buena DL de Washington y, aunque es una misión de esta línea, corresponde a ambas defensas prevenir este juego de constante simulación con las RPOs que suelen usar ambos ataques.
- Aunque Eagles pone pocas yardas por aire, la amenaza de Devonta y AJ Brown siempre está, por ello la secundaria de Commanders debe estar ocupada en ellos para conciliar evitar esas big plays aisladas de las que hablaba con la defensa a Saquon. No se puede cubrir todo, si tapas por arriba doblando a AJ, dejas la caja más ligera y eso Hurts y Barkley lo saben, y si hay alguien que lee esos huecos y decide bien es el QB de Eagles.
- Jayden Daniels. El rookie se ha convertido, por méritos propios, en una amenaza más que real en momentos donde se juega lo más importante de cada partido. Si Commanders se pega a cada encuentro hasta el final es gracias al QB. Con Daniels ya no sabes si lanzará por aire, cosa que hace de forma excelente especialmente fuera de números, o si correrá, amenaza ésta más que real. Nada que perder, y mucho que ganar. La vigilancia al QB será clave por Eagles.
Se enfrentan dos estilos parecidos, basados en la capacidad de movimiento del QB moviendo muchas yardas por tierra, pero uno se apoya más en el pase y el otro en la carrera de su running back. Se juega en el frío de Philadelphia y eso no es cosa menor, que se lo digan a Stafford y a sus receptores.
Y con todo nos llegan estas enormes finales de Conferencia, disfruten, el camino se cierra. Feliz semana.