Llega la época navideña y tras cuatro meses de competición todos los equipos están bajo mínimos y en busca de un regalito que les de ese empuje final que les permita llegar al segundo domingo de Febrero y que por esas fechas estén en Nueva Orleans y no en Cancún disfrutando de sus vacaciones. Hoy, Santa Claus (o sea se, yo) va a proponer un regalo para cada uno de los nueve equipos ya clasificados a Playoffs que les daría ese empuje necesario para pelear por todo.
Como es imposible pedir un chamán que recupere a todos los lesionados que tienen los Lions (hasta una veintena de jugadores están en la Reserva de Lesionados ahora mismo) el regalo que necesitan los Lions para lo que queda de temporada es salud para Jahmyr Gibbs. Desde que llegó a Detroit el joven corredor estuvo siempre acompañado por David Montgomery y en esta temporada solo había superado una vez las 20 carreras en un partido (21 ante Indianapolis). La semana pasada frente a los Bears sumó 23 y sin Montgomery al lado su carga de trabajo puede que se mantenga igual de alta en el futuro. Siendo su cuerpo además bastante liviano… ¿podrá aguantar tantos golpes?
Que Jalen Hurts juegue lo antes posible. En la derrota de Philly en Washington pudimos apreciar la diferencia entre un quarterback como Hurts y uno como Kenny Pickett. En la Primera Parte no hubo ni una sola jugada en la que Washington defendiese con más jugadores en la caja que los Eagles (sinónimo de que estaban preocupados por tapar el juego de pase) y Saquon Barkley se salió. Con la lesión de Hurts eso cambió y los Commanders limitaron a Saquon en la segunda parte, despreocupándose por completo del juego de pase y obligando a Pickett a ganarles el partido.
Que sigan yendo como tapados. Nadie habla de los Vikings, que se han convertido en el equipo 13-2 más infravalorado que recuerdo. Y que siga así. Minnesota tiene a dos de los mejores playcallers de la NFL: Kevin OConnell está manejando a la perfección a un Sam Darnold que está de dulce y Brian Flores ha conseguido que una defensa sin apenas estrellas sea una de las más temidas de la NFL.
Que Jordan Love siga siendo el Jordan Love de Diciembre. Creo que los Packers son uno de los mejores equipos jóvenes de la competición y con Love jugando al nivel de los últimos meses puede pelear con cualquiera tanto en la NFC como en la AFC. En los últimos 5 encuentros Love ha lanzado 8 TD y ni una sola intercepción, al igual que el año pasado en el que en los últimos 8 partidos de temporada regular solo le interceptaron un pase y asistió 18 anotaciones. Con un Jordan Love enrachado este equipo mete miedo.
Que la defensa sea capaz de seguir provocando turnovers. La unidad defensiva que dirige Steve Spagnuolo había pegado un pequeño bajón esta temporada, acuciando la pérdida de L'Jarius Sneed al otro lado de Trent McDuffie y sufriendo bastante desde la secundaria. Tras las dos intercepciones que consiguieron ante los Texans, Kansas City es la 14º defensa defensa que más turnovers provoca de la NFL con 18 y necesita mejorar sus prestaciones para pelear por todo en Playoffs.
Que lo que dijo Josh Allen en rueda de prensa tras el partido ante New England sea verdad. El máximo candidato a MVP dejó caer que Buffalo prefería guardar ciertas jugadas ofensivas para Playoffs antes que pelear por el seed #1 pero a cambio mostrar todas sus cartas. Esperemos que esa sea la razón por la cual fueron superados tanto en yardas totales (379 a 324) como en primeros downs (New England consiguió 9 más que los Bills) ante unos Patriots con 3 victorias en toda la temporada.
Que encuentren la manera de vencer a equipos TOP. Pittsburgh llegaba al partido de hace dos semanas ante Philadelphia habiendo enfrentado al calendario más sencillo de toda la NFL y afrontaba un Tourmalet complicado con encuentros frente a Eagles, Ravens y Chiefs. Ya suma dos derrotas, pero una victoria ante Kansas City demostraría que los Steelers son un equipo a tener en cuenta en Playoffs y daría confianza a los de Mike Tomlin para enfrentar las eliminatorias.
Que la defensa sea la de las últimas semanas. Baltimore comenzó el año siendo un equipo tremendamente endeble en la secundaria. En las primeras 9 semanas fue el 5º peor equipo de la competición en efectividad permitida al equipo rival en el pase (EPA/dropback) pero se han colocado como el mejor equipo en ese aspecto a partir de la Semana 10 gracias a un Marlon Humphrey que, jugando más en la posición de Nickel, está teniendo la mejor temporada de su carrera. La realidad de esta defensa está, seguramente, en el punto medio, pero con un ataque tan potente como el de los cuervos cualquier cosa que no sea una defensa nefasta les permitirá llegar lejos.
Que Diontae Johnson vuelva a ser el de los Steelers. Durante sus 5 temporadas vestido de “acerero” Johnson fue uno de los receptores más infravalorados de la NFL. Su capacidad para correr rutas le convirtió en uno de los jugadores más fiables en el exterior de toda la competición, pero su paso por dos equipos este año fue catastrófico. Cuando salió de Carolina para recalar en Baltimore pensaba que se convertiría en una pieza clave en la lucha de los Playoffs, pero nunca encontró conexión con Lamar Jackson y solo consiguió una recepción para 6 yardas en 5 partidos. Tras la traumática lesión de Tank Dell unida a la de Stefon Diggs los Texans necesitan a alguien que pueda complementar a Nico Collins y sobre todo un jugador que, al contrario que un Collins que es más efectivo en rutas que requieren un largo desarrollo, pueda desmarcarse rápido. Algo que necesita urgentemente CJ Stroud mientras juega detrás de una de las peores líneas ofensivas de la NFL.